6 consejos para dejar de morderse las uñas

El mal hábito de morderse las uñas puede acecharnos de por vida. Y las consecuencias no son solo estéticas. Aquí hay 6 consejos para dejar de moderse las uñas.

La onicofagia es el término médico para morderse las uñas. Este trastorno compulsivo, que afecta tanto a adultos como a niños, se considera un "trastorno del control de los impulsos" y se clasifica como un trastorno emocional y del comportamiento que se presenta en la infancia o la adolescencia.

Puede parecer un hábito menor, pero en realidad morderse las uñas puede tener graves consecuencias.

Las cutículas y las uñas pueden enrojecerse y doler, las yemas de los dedos pueden infectarse y sangrar y ser más sensibles a los agentes bacterianos y virales. Incluso los dientes se ven afectados por este roce continuo y la onicofagia puede llevar a la definición de una mal oclusión o enfermedad de las encías.

La ingestión de residuos de uñas puede causar problemas estomacales, se facilita la propagación de infecciones y, además, no se deben subestimar las consecuencias estéticas y psicológicas de morderse las uñas.

Leer también: ¿Qué significa la forma de media luna en tus uñas?

Las causas de la onicofagia

La causa del hábito de morderse las uñas es principalmente psicológica, pero también puede tener un origen imitativo.

Veamos cuáles son las principales causas de morderse las uñas:

  • Estrés y tensión: no es posible sostener una tensión emocional que la impulse a llevarse los dedos a la boca para liberar el estrés y la ansiedad.
  • Trastornos de la alimentación.
  • Aburrimiento: no puedes gestionar los momentos de aburrimiento e inactividad.
  • Autolesión: especialmente los adolescentes pueden descargar sentimientos y emociones negativas contra sí mismos que, en cambio, deberían dirigirse hacia el exterior.
  • Imitación: los niños que ven a un adulto de referencia que se lleva los dedos a la boca pueden tomar este hábito y luego continuarlo en el tiempo.

Onicofagia, el aspecto psicológico

La onicofagia es especialmente común entre las personas estresadas y es un hábito que generalmente se desencadena en niños y en la edad preadolescente, y que con el tiempo puede desaparecer, pero en 5 de cada 100 personas también se mantiene en la edad adulta.

Según algunos psicólogos, llevarse algo a la boca recuerda, a nivel metafórico, la experiencia del pecho de la madre y se utiliza la acción de morder uñas y cutículas para obtener el mismo efecto tranquilizador (como chuparse el dedo).

Morderse las uñas permite que la persona libere la ansiedad, el estrés y la tensión, pero también puede ser una forma leve de autolesión.

Leer también: 21 cosas que su cuerpo puede decirle sobre su salud

Onicofagia en niños

Se estima que el 60% de los niños y el 45% de los adolescentes se muerden las uñas. Muchas veces se trata de un hábito imitativo, es decir, uno de los padres se muerde las uñas e imitan el mismo comportamiento que luego se convierte en hábito. Pero en algunos niños, morderse las uñas puede ir acompañado de otros trastornos, como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), el trastorno de oposición desafiante (ODD), la ansiedad por separación o la enuresis nocturna.

Remedios para dejar de morderse las uñas

En la mayoría de los casos, es posible resolver el problema de morderse las uñas cuidándolas, haciéndose la manicura, manteniendo las uñas cortas y tal vez aplicando el esmalte de uñas. Ver unas manos bonitas y cuidadas a menudo puede disuadirte de las ganas de morderte las uñas.

Con esto en mente, es posible reconstruir las uñas dañadas por morderse las uñas. Es una reconstrucción estética que debe ser realizada únicamente por personal experto y acreditado.

En casos de morderse las uñas de forma severa es bueno seguir una terapia con un psicoterapeuta que ayude a entender las razones más profundas de este hábito.

Medicamentos

En la farmacia hay una gran variedad de productos, naturales y farmacéuticos, para el tratamiento de la mordedura de uñas. Generalmente se trata de preparados que endurecen y resisten las uñas, dan un sabor amargo y desagradable y al mismo tiempo nutren la uña en profundidad.

Estas soluciones ayudan a prevenir la tentación de morderse las uñas, protegiendo las uñas y la zona periungueal gracias al sabor amargo y picante, favoreciendo el crecimiento natural.

Si sufre morderse las uñas es útil seguir algunas precauciones:

  1. Mantener las uñas cortas y bien cuidadas
  2. Usa esmaltes de uñas repelentes
  3. Aplicar un esmalte de uñas transparente o de color
  4. Hacer una manicura regularmente
  5. Si te sientes particularmente estresado, prueba técnicas de relajación alternativas como el yoga o la meditación
  6. Ponte una pulsera elástica alrededor de la muñeca y abróchala cada vez que sientas ganas de morderte las uñas.

VIDEO RECOMENDADO

Publicar un comentario

0 Comentarios