Los arándanos son una fruta de color violeta que destaca por su riqueza en vitaminas, oligoelementos y sales minerales. De hecho, esta pequeña fruta contiene cantidades importantes de magnesio, potasio, calcio, hierro y zinc. Son sabrosos y bajos en calorías y para cosecharlos puedes aprender a plantar el arbusto en casa. Los arándanos se pueden cultivar en el jardín o en una maceta grande en el balcón, sólo sigue algunos consejos.
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En primer lugar, hay que distinguir dos especies de
arándanos: Vaccinium corymbosum , un arándano arbustivo de entre 1,5 y 2 metros
de altura, fácil de cultivar en macetas, en el jardín o en el huerto; el
Vaccinium myrtillus , un arándano silvestre de entre unos 20-50 cm y de follaje
siempre verde . Este último suele crecer en páramos, bosques y claros. En
primavera, aparecen racimos de campanillas blancas en el arbusto. Más adelante
en el verano aparecen las bayas, que maduran para el consumo. Algunos árboles
de esta fruta se autopolinizan y puedes simplemente plantarlos para que den frutos.
Pero ahora veamos…
Cómo plantar los arándanos en casa
Los arándanos se deben plantar al sol o sombra parcial y en
suelos muy ácidos, bien drenados y libres de piedra caliza. Si tu jardín no es
el adecuado, puedes plantar el arbusto en un recipiente y cubrir el fondo con
una capa de guijarros de arcilla o grava y tierra de brezo. Además, para
obtener una buena cosecha, intenta plantar los arbustos en otoño para favorecer
el enraizamiento. De hecho, si las plantas en primavera, recuerda regarlas
periódicamente para que puedan crecer de forma óptima.
Para mantener tu arbusto a partir de marzo, abonarlo con un
abono especial para rododendros. En otoño será necesario cubrir el arbusto con
corteza o agujas de pino para preservar la acidez del suelo. Asegúrate de que
el riego sea regular y en invierno recuerda retirar la madera muerta sin podar
el arándano.
Gracias a estos valiosos consejos podrás plantar tus arbustos de arándanos de forma óptima y ahorrando dinero.
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